Libros de superación personal: cuando la dedicación te ayuda a alcanzar tus objetivos

Para sus detractores, los libros de autoayuda o de superación personal son una especie de placebo, esos medicamentos sin principio activo que solo producen en los que los toman un efecto psicológico de creer que han mejorado porque su necesidad de hacerlo es más fuerte que los efectos engañosos de un tratamiento que no mejora la salud.

Sin embargo, la literatura de autoayuda vende cada año miles de ejemplares. Escritores como Paulo Coehlo en Brasil y Osho en la India son claros exponentes de este género de éxito.
Detrás de esta industria tan millonaria, está la gente que se ilusiona con poder superar de forma rápida sus angustias vitales, aunque tras ellas estén latentes traumas y causas complejas que precisaría muchas horas de diván frente a un psiquiatra.

A medida que se disparan en el mundo los índices de personas deprimidas, mayores son las tiradas de ejemplares de este tipo de libros.
Pero es indiscutible que los autores de autoayuda saben conectar con el público. “Puedes programar tu mente para aumentar tu autoestima y ser feliz. Es un entrenamiento de solo cinco minutos diarios y por Internet. Con ejercicios simples, la mente aprende a defender la felicidad y no el sufrimiento”.

Con reclamos como este de superar las dificultades y alcanzar la paz en de forma rápida es comprensible que cientos de miles de personas se vean cada año seducidas por este tipo de filosofía de enfermo, cúrate a ti mismo.

Los detractores de la autoayuda creen que la máxima conquista que puede lograr es que quizás nos sirva para algo y que, en definitiva, es una industria que vive de vender esperanza. Para ello lo ilustran con el ejemplo de la autora china Chou Yoon-Hee, que tras publicar una veintena de títulos de superación personal acabó con su vida suicidándose en una habitación de hotel. Para los defensores de esta forma de terapia en forma escrita, las ventajas son evidentes.

Te motivarán a reflexionar sobre tu situación actual

El simple hecho de acercarse a una librería y hojear títulos que prometen una solución rápida y no dolorosa para los problemas que angustia a estas personas, es en sí mismo un beneficio: se está reconociendo un problema y la necesidad de encontrar una solución.

Este siempre es el primer paso en cualquier terapia para superar un problema complejo. Los libros de superación personal ofrecen una guía por la que transitar, un manual de instrucciones que permite a algunos localizar el punto de roturo emocional, diagnosticar el origen de su fallo y proponer una solución.

En el mundo animal, siempre hay un macho alfa el que guía la manada. El ser humano también necesita de un guía, un consejero espiritual, un terapeuta o una persona sabia que sepa dar con la tecla y nos muestre el camino.

En las guías de superación personal se pueden hallar soluciones que han experimentado los autores u otras personas para enfrentar el resentimiento, el orgullo, la tendencia a la manipulación, el aislamiento social, o saber reconocer los vicios que han arraigado en nuestro carácter y las formas de penetrar en sus causas y obtener una sanación.

Aprende a dejar atrás la pereza para que puedas salir de la zona de confort

El Principio de Peter afirma que “En una jerarquía (sea una empresa, una organización, etc.) todo empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia”. Dicho de otra manera, si estás realizando un trabajo para el que no estás preparado, acabarás fracasando estrepitosamente.

Para Einstein, todo aquel que se empeña en hacer las cosas como siempre las ha hecho, acabarán obteniendo siempre los mismos resultados. Para salir de esta zona de confort en la que nos refugiamos por miedo a abandonar el hábitat en la que nos sentimos seguros y convencernos de caminar campo a través explorando nuevas rutas y enfrentándonos a nuevos desafíos, es necesario adquirir nuevos conocimientos y tener otras aptitudes a través de la superación personal.

Conoce el proceso de crecimiento interior

A través del conocimiento interior, adquirimos la sabiduría necesaria para reconocer dónde y en qué fallamos y a aprender las técnicas y destrezas emocionales para superar estas carencias y debilidades a través de la empatía y la inteligencia emocional.

A través de este desarrollo interior aprenderemos a ver cosas positivas en los sucesos más triviales de nuestra vida diaria. Con la superación personal aprendemos a lograr cada día una pequeña conquista frente a las debilidades de nuestro carácter, a tener una visión positiva frente a las adversidades y aprender a mantenernos fuertes y en pie cuando arrecie las tempestades personales en sus múltiples formas: las rupturas y enfrentamientos con las personas queridas, las carencias materiales, los altibajos en la faceta laboral.

Con todo ello aprenderemos a lidiar con todos estos problemas con los que la vida nos sacude con mucha frecuencia, entrenando nuestra capacidad de resistencia frente a la angustia y la depresión.

Mejora tu capacidad a la hora de tomar decisiones

Muchas personas se paralizan cuando tienen que tomar una decisión. Algunas son tan simples como elegir un perfume por su precio o por el aroma que despiden. Lo mismo ocurre cuando nos invitan a una recepción y pasamos horas junto al armario decidiendo si nos viene mejor un traje azul o un gris marengo.

Estos dilemas diarios se extienden a todos los aspectos de nuestra vida cotidiana. La indecisión nos paraliza y el miedo a equivocarnos y no quedar bien hace que continuamente demos vueltas en círculo sin acabar de llegar a ninguna parte. Si esto sucede con el menudeo de los aspectos más cotidianos de la vida, cuando llega el momento de elegir entre varias opciones en asuntos más trascendentales como casarnos, tener hijos o cambiar de trabajo, las dudas pueden llegar a ser enfermizas.

Para mejorar nuestra capacidad a la hora de tomar decisiones, habría que analizar en profundidad las opciones a las que nos enfrentamos siguiendo unas pautas:
–Elegir en las dos opciones más decisivas por las que debemos inclinarnos.
–Analizar sus pros y contras, las ventajas e inconvenientes de cada opción, ¿Qué ocurrirá si elijo esto? ¿Y si me inclino por lo contrario?
–Poner un tope a los riesgos máximos que estás dispuesto a asumir de cada opción.
-Una vez elegido el bien mayor o el mal menor, actúa en consecuencia sin demoras.